02 enero 2016

Cuando se cree que ligar a cualquiera, es ser conquistador.




Cuando se cree que ligar a cualquiera, 
es ser un conquistador.



En la era en la que vivimos, donde todo debe hacerse rápido hasta que no nos den el tiempo de disfrutarlo. En donde siempre se esté pensando en lo próximo que hay que hacer sin llegar a tomar el gusto por lo que se está haciendo. Es difícil pensar que una relación a largo plazo, porque ello nos cortaría la posibilidad de poder descubrir cosas nuevas, nos restringe la libertad, nos cortan las alas para poder volar en cielos altos y así sentir el viento ante nuestra cara. Ahora me pregunto, quien nos hizo creer que una relación nos ata como si nos hiciera mal, quien tuvo la paranoia de decir que estar con alguien nos hace cortos e infelices, quien con sus frustraciones y miedos contagio al resto y cuando lo creyeron.
Cuando le pregunto a un soltero si tiene novia, automáticamente salta un ¡NO!  con entusiasmo como si le preguntara si siente una atracción hacía su hermana, y si la misma pregunta se la hago a una chica salta con su autosuficiencia - ¿No, para qué? Y a la misma vez buscan relacionarse con lugares virtuales como Facebook, decir algo que se sientan interesante opinando en Twitter o en buscadores como Badoo. Pero en realidad ¿Qué están buscando? Acaso algo para saciar sus deseos sexuales, carnales que al fin y al cabo no dan otra que soledad a la mañana siguiente. No quieren más que pasarse un número telefónico para cuando tengan ganas uno del otro tan solo en un encuentro sin compromiso y cubran la cuota, pero una vez completa ya salieran como si fuera un simple trámite.
Que nos pasa como sociedad, por no buscamos algo que nos interese de la persona que llegáramos admirar en vez de gustar, algo que nos despierte el instinto de que nos haga descubrir el porque nos llama la atención en vez el instinto animal. Cada vez más la tecnología nos acerca a los primates que en vez a personas más civilizadas. Por lo menos antes tenían el cortejo y hacían uso de las armas de seducción.

Hoy por hoy no tiene edad ni frontera lo que estoy diciendo, no hablo simplemente de un sector de una provincia o país, ni tampoco sobre adolescentes porque también veo gente sobre paso la barrera de los treinta y más de las cuatro décadas vividas. Antes se decía estar de trampa, pero hoy es un sector muy reducido que se encuentra en pareja estable o bien llevando la responsabilidad de un anillo matrimonial. Hoy se cree que cuando más tildes deje en el mural de lo vivido, mucho mejor, cuando en realidad, en mi humilde opinión, tuvo muchas experiencias, pero pocas vivencias. Porque la vivencia a mi entender es cuando se las tiene con alguien quien lleva a su lado durante un lapso prolongado, cuando con esa persona tiene momentos difíciles, alegres, momentos donde busca el apoyo del otro y en otros donde tan solo presta el pecho para luego abrazar a quien quiere proteger.
Seguramente no tiene que ver con lo que estoy entregando sobre tener una mejor imagen, pero también la Imagen dice de nuestro accionar, porque si visto bien, sé pararme ante la vida, pero diariamente cambio de pareja, tanto en el hombre como en la mujer no da una buena información a los otros. En el hombre dará una sensación de inmadurez y aunque se sienta ganador una buena mujer nunca lo vera como una opción más que para sacarse sus gustos y luego lo descartará porque para eso solo sirve. Y para la mujer, les guste o no, por más que sientan que están totalmente liberadas pertenecen a una sociedad muy machistas y no solo a los ojos de los hombres porque las más duras en criticar sus conductas son sus propios pares.

Claro que con esto no quiero decir que mañana todo el mundo se ponga en pareja, pero si valorarse más. Leyendo un libro donde ser un hombre con valor o bien la diferencia de no serlo, es que el hombre sin valor va detrás de una mujer, cuando el hombre con valor sabe conquistar a una mujer sin llegar decirle nada atrevido ni galante sino simplemente algo que la haga especial en el lugar, pero con tanta naturalidad que ella sienta atracción hacía el sin que él se lo proponga. Lo mismo debe hacer la mujer, y eso que la mujer esta armada hasta los dientes por medio de la seducción por que la naturaleza le otorgo sus curvas, sus movimientos, su cabello, su mirada, su buen vestir, su caminar que no necesita mostrar sus pechos o sus piernas para llamar la atención a un hombre. En cambio, cuando los cañones son generalizados es difícil seducir a quien se quiere específicamente por cualquier hombre sin valor irá como hiena detrás de la presa y hay quienes ni se molestan por correr un poco.

A lo que quiero hacer entender a mis lectores es que, si hay alguien que realmente te interesa en la vida, enfócate en esa persona, que te despierta cierta inestabilidad cuando la ves. Porque eso que dicen ahora las mujeres que hasta que llegue el príncipe azul, seguirán probando el resto, les digo que mientras tanto el resto no las va a ver como su princesa sino como el resto entre las otras mujeres, porque todo es recíproco en la vida.


Porque como dice el título “Cuando se cree que ligar a cualquiera es ser conquistador”, en realidad no lo es, en todo caso ha tenido suerte y/u oportunidades. El verdadero conquistador es cuando se consigue lo que se quiere, porque se persigue, se lucha, se pelea hasta que por fin logra su cometido. Conquistar a quien en realidad se quiere.




Sebastián Lejona
Asesor de Imagen.









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